Al detalle: optimización en el diseño y desarrollo de vuestro web

«At its heart, web design should be about words. Words don't come after the design is done. Words are the beginning, the core, the focus.
Start with words.
Cheers,
Justin Jackson»
https://justinjackson.ca/words.html

¿Qué pasa exactamente cuando escribimos una dirección en la barra de nuestro navegador (por ejemplo Firefox) y pulsamos la tecla [Entrar]?

Nuestro navegador pregunta al servidor DNS para conseguir una dirección IP y genera una petición HTTP que se envía a la dirección del servidor donde la web esté alojada. El servidor la recibe y busca internamente a qué recursos corresponde. Si se pide una página estática, sirve directamente el archivo: la envía de vuelta hacia el ordenador que lo ha pedido. Si, en cambio, se encuentra con una web dinámica, significa que, con cada visita:

  1. el servidor primero necesita ejecutar un código (habitualmente php, a veces python u otros),
  2. el programa del servidor web pide ayuda a un intérprete de este lenguaje que lee las instrucciones,
  3. a menudo necesita pedir contenidos a una base de datos (o sea pide materiales a otro programa),
  4. genera el fichero que representa la página solicitada,
  5. lo devuelve al servidor web y éste lo envía hacia el ordenador que lo ha pedido.

Este archivo puede indicar al navegador otros ficheros necesarios, por ejemplo la hoja de estilo, una imagen, un script. Cada vez es más habitual que las páginas contengan (y cada vez más largo) código en lenguaje javascript, que es un conjunto de instrucciones que necesita ejecutar el navegador. Puede suceder, en estos casos, que el navegador necesite pedir más contenidos en el servidor.

Nada de esto es malo per se.

Por otro lado, las páginas dinámicas necesitan volver a acoplar la página a cada visita, a diferencia de las páginas estáticas, que en principio se generan únicamente cuando se hacen cambios en el contenido, por ejemplo cuando se añade una nueva entrada en el blog.

Hay un malentendido muy común: las webs estáticas sí pueden tener menús que se despliegan, imágenes que reaccionan al pasar por encima, y todos los demás elementos "chulos" de estilo. De hecho, cuando visitamos una web, no podemos saber si se genera de forma dinámica o si es una web estática.

Las páginas estáticas también pueden tener hojas de estilo o código javascript que suelen aportar una apariencia "interactiva" para las personas visitantes.

El problema comienza cuando las cosas pierden la medida óptima, muchas veces debido a elaborar webs con editores y plugins muy visuales e intuitivos pero que nos complican la vida en la parte servidora, principalmente:

  • PHP con errores o «bruto»
  • bases de datos grandes o demasiado complejas
  • muuuuuchas peticiones (hacia el dominio propio o hacia terceros)
  • mucho volumen de tráfico
  • uso excesivo de espacio de almacenamiento
  • javascript cargante
  • exceso o falta de mantenimiento de conectores (plugins)
  • imágenes / vídeos enormes
  • exceso de fuentes

No os dé miedo consultar el apartado "Soy desarrollador/a" donde explicamos cómo mejorar cada uno de estos factores.